Este año he hecho un curso muy interesante, y en uno de los módulos hablaban de la perspectiva sistémica y sus diferentes  prácticas.

Aprovecho para contaros que la perspectiva sistémica también se aplica en el mundo de los recursos humanos, y verás de qué va 🙂

Me pareció muy interesante en ese momento y automáticamente mi mente creó la necesidad de estudiarlo, desmenuzarlo, con lo que me he pasado como un par semanas leyendo sobre el tema y tratando de profundizar e integrar conceptos.

Como siempre para coger las primeras definiciones wikipedia es fantástico, así que os dejo el link por si queréis conocer de dónde viene: https://es.wikipedia.org/wiki/Pensamiento_sistémico

Muy bien, siguiendo con el tema el pensamiento sistémico simplemente quiero comentaros que es complejo, incluso yo diría difícil de entender. Sin embargo, más complejos somos los humanos, es por ello que me ha fascinado tanto este tema. Porque ambos somos complejos.

 El pensamiento sistémico evalúa el conjunto de un problema, digamos que lo trocea para estudiar cada parte del sistema y finalmente lo analiza como un conjunto, tratando de ver más allá de los pequeños trozos del problema. Es por ello que se considera la antítesis al pensamiento analítico, que no relaciona las partes entre sí, y las trata individualmente.

El pensamiento sistémico tiene su origen en la biología, en el estudio de la dependencia y la adaptación de los seres vivos al ambiente ¡y aquí es dónde quiero llegar!  ¡Las organizaciones somos puros ecosistemas! Entendido según la RAE por ecosistema como sistema ecológico constituído por un medio y los seres vivos que habitan en él, así como por su relaciones mutuas.

A mí me parece fascinante ver cómo desde el campo de la biología podemos adaptar este pensamiento sistémico al ámbito de las organizaciones. En lenguaje coloquial diría, ¡muy fuerte! Jajajaja

Así que me surgen estas preguntas…

¿Para qué es importante no aislar los problemas? ¿Para qué debemos adquirir una visión global cuando los estamos gestionando o tratando de resolver? Te invito a reflexionar sobre ello.

Y llegados a este punto me gustaría preguntarte ¿Te has parado a pensar en alguna ocasión qué beneficios podría tener para ti como profesional adquirir una visión global?

En muchas ocasiones la tendencia es trabajar como departamentos/personas estancos, sin preocuparnos en considerar el impacto que tienen nuestros actos dentro de la organización y sobre otras personas. Simplemente porque no tenemos en cuenta que somos parte de un todo más grande, y sobre todo, y desde mi punto de vista personal, porque nadie nos ha enseñado desde el principio de nuestra vida laboral que las organizaciones son sistemas abiertos. Las organizaciones cambian, incluso las más tradicionales. Las organizaciones se mueven, interactúan, tienen un componente social, un componente individual y sobre todo gestionan los problemas naturales que surgen entre las relaciones humanas, porque las personas son la base de cualquier organización.

Las personas…

El conflicto, la diferencia de ideas, las tradiciones, las costumbres, los cambios de actitud, son parte de cómo el ser humano se relaciona con su entorno y su ecosistema. Es por ello que tratar cada una de sus partes dentro de un todo mayor, es fundamental para la salud de la organización y las personas que la conforman.

Si utilizamos el pensamiento sistémico dentro de nuestra cultura corporativa y personal,  tendremos la capacidad para ver la totalidad de factores que intervienen en los  problemas que se nos presentan sin buscar culpables. No se trata de culpabilizar ante los problemas, se trata de buscar soluciones.

Esta es la ventaja competitiva que tienen las organizaciones con la madurez suficiente como para resolver bajo esta perspectiva, pues en vez de orientarse en encontrar responsables, tienen un alto grado de compromiso en determinar los factores que provocan el problema para encontrar una solución. Y los factores no son las personas, sino los elementos o causas raíz que provocan estos problemas. ¡Qué sencillo verdad!

Es como aplicar un sistema de gestión de calidad en las relaciones humanas… Jajajajaja Buscar la causa raiz. ¡Me encanta!

Esta semana te pregunto ¿Cuál es el cambio que vas a incorporar en la gestión de problemas y conflictos como individuo dentro de tu organización?

¡Adelante y sin miedo! La gestión adecuada del conflicto te hará crecer.

Gema Berrocal

18/05/2024